Hola,
Llueve. Mi bicicleta quedó estacionada anoche frente al Café y me fui a chingolear con el bombón más bombonazo de Fano, Valerio, de 20 años y una casi ilegal belleza, por dentro y por fuera.
Fuimos al Pensiero Stupendo de Senigallia, un boliche donde el 98% del público eran hombres (gay, of course!). Lindo sitio, lleno de colores y pasadizos, un poco sucio para los estándares europeos, casi casi como los boliches porteños. Y lleno de drag queens!
Hasta hubo un show de Caperucita Roja en versión de cabaret: "Che cappuccetto rotto che hai!" muy divertido :D
Baile, sacudí un poco el esqueleto, encontré amigos y conocidos, hice algunos nuevos, e hice el show de porteña recien llegada que viene por primera vez, y zafé de pagar la admisión. Acá los boliches suelen tener un sistema de socios, en el que uno paga una cuota anual y se asocia, pudiendo entrar después gratis durante el resto del año. Como no tenía planes inmediatos de regresar, porque es lejos, y hay que ir en auto, no tenía intenciones de asociarme. Supongo que los convencí con mi cantinela tercermundista, y con el hecho de ser una de las 4 únicas minas presentes, y entré gratis...
Cerca de las 5am Valerio me trajo de vuelta a casa (y así fue como la Mulatona quedó bajo la lluvia en downtown Fano!)
Para hoy había una excursión planificada a las termas al aire libre. Y llueve, asi que fue Martín solo con Serena. Los demás mariconeamos y nos quedamos en casa, al abrigo, lavando ropa (típica actividad de domingo, porque la energía eléctrica cuesta casi la mitad!), tomando mate, y webeando.
Yerba Update: El viernes compré un paquete de medio kilo de yerba Amanda que conseguí en una herboristería del centro, para llevarme a Suecia. La de casa se había acabado, y Santiago penaba y preparaba café para su desayuno. Me apiadé y le regalé mi paquete. Y me fui después al bar. Cuando volví, encontré sobre mi cama un kilo de Canarias!!! Los chicos habían ido a un boliche en Marotta que vende todo tipo de productos rioplatenses y trajeron mi yerba favorita... y dulce de batata, alfajores y dulce de leche!!!!!!
Pero lo de la yerba fue una verdadera sorpresa, y tal como había prometido en un post anterior, el Negro se ha ganado mi amor eterno! Y Martín también, of course, ya que fue quien recordó que es mi yerba favorita, con sabor a vacaciones en La Paloma. Al tomarla se oye el ruido del mar y las gaviotas y las puestas de sol y la arena del Atlántico... Ay, el verano... por suerte para mí, está a sólo un mes y medio.
Mientras, me preparo para el crudo invierno, a sólo 4 días del solsticio.
Besos desde Rosciano, fracción de Fano,
Pao
No hay comentarios.:
Publicar un comentario